El reiki es una técnica de curación a través de la energía; si estás interesado en saber para qué sirve el reiki continúa leyendo, pues aquí te podemos dar algunas respuestas.
Qué es el reiki y para qué sirve el reiki
El reiki es una técnica japonesa que ha ayudado a miles de personas a curarse de diversos males, utilizando la energía de los cuerpos. No es un sustituto de la medicina, pero interviene favorablemente en los procesos de curación haciendo que la sanación de enfermedades corporales y espirituales sea más rápida. Para los descreídos está muy bien porque no sigue religiones ni filosofías, y ni siquiera hay que creer en él: nada más corrige los niveles energéticos y esto promueve cambios físicos, curando a la gente de diversas dolencias.
¿Qué es Reiki?
Reiki quiere decir algo así como «Energía Vital Universal». Es un método japonés que busca equilibrar la energía del cuerpo para conseguir la curación. Esta idea de equilibrar la energía es común a la mayor parte de las terapias en todo Oriente, desde la acupuntura a la dieta macrobiótica pasan por las distintas formas de Yoga, e incluso las artes marciales (que allá también exigen profundos conocimientos médicos tradicionales).
Tiene múltiples ventajas.
- Es un sistema seguro, sin efectos secundarios.
- Es fácil de aplicar. Simplemente el paciente se tumba y el sanador pone las manos suavemente en distintas zonas del cuerpo.
- Es enormemente relajante. Actúa eficazmente en tensiones emocionales, ansiedad o depresión.
- Es fácil de aprender.
- Reduce los efectos secundarios de terapias agresivas como cirugía o quimioterapia, permitiendo al organismo una recuperación más rápida.
- Es un magnifico preventivo que mejora las defensas del organismo.
Todos estos factores me han llevado a recomendarlo como primera opción para la gente que desea aprender terapias energéticas.
También es muy útil como terapia familiar. Cualquier miembro de la familia puede aplicarlo. Se ha mostrado muy eficaz en niños y adolescentes, tanto en sus dolencias físicas como en sus problemas de desarrollo, estudios, etc.
Es difícil explicar la experiencia Reiki, tanto desde el punto de vista del paciente como del alumno. Es algo que hay que experimentar.
El reiki ofrece muchos beneficios, algunos muy concretos como aliviar dolores crónicos (reumatismo, artrosis, artritis, migrañas, lumbalgias o dolores menstruales); coadyuva en el proceso de curación de lesiones, por ejemplo, en la cicatrización de heridas o lesiones óseas.
Reduce la inflamación producida por esguinces, desgarrones musculares y similares. Además, refuerza el sistema inmunológico haciendo que el cuerpo pueda luchar contra enfermedades virales, o contra infecciones como la gastroenteritis, la otitis, la dermatitis, etc.
Quizá uno de los aspectos más importantes en esta pregunta de para qué sirve el reiki es, precisamente, la influencia sobre nuestro sistema inmunológico, pues como esta técnica equilibra los campos energéticos y espirituales de las personas, promueve en general el mantenimiento de la fortaleza física en aras de enfrentar tanto dolencias existenciales (como puede ser una depresión) como enfermedades más graves, como el cáncer, pues las personas que se han sometido a sesiones de reiki han aguantado mejor sesiones de quimioterapia.
Para qué sirve el reiki y cómo funciona
Cuando alguien se aplica (o le aplican) reiki, entra en un estado de relajación profunda, en el que logra una mayor serenidad y tranquilidad (de allí que trastornos como la depresión cedan, y estas personas comiencen a ver en perspectiva su vida y sus problemas, consiguiendo muchas veces soluciones), además de un conocimiento de sí mismo mucho mayor. Todo esto proporciona más felicidad, y cuando la mente y el espíritu están felices, el cuerpo responde con buena salud.
Algo que hay que mencionar es que cualquier persona interesada de veras en entender esto de la energía de los cuerpos y en ayudar a los demás puede comenzar a hacer reiki. No se necesita un duro y difícil entrenamiento (aunque obviamente sí se necesita preparación): no son personas “elegidas” o dotadas de algún poder extrasensorial extraordinario.
Sólo debe aprender a abrir el canal de reiki y utilizar su energía y la de la otra persona, y así se va adquiriendo la capacidad, y mientras más se practique más fuerte se vuelve. Y cuando se combina con otras disciplinas, como acupuntura o medicina, las funciones terapéuticas se potencian y se logran beneficios más rápidamente.
Y ahora que ya sabes para qué sirve el reiki, seguramente has notado que básicamente su función es ayudar a los demás, y es probable que estés interesado en aprender esta técnica.
Estos cursos contienen un sistema muy fácil de seguir incluso si no tienes conocimientos previos de reiki, y muy pronto podrás realizar reiki de manera eficiente Vas a convertirte en un Maestro reiki con estos simples ejercicios de visualización, que te darán el poder de sanar diversas situaciones como dolores corporales, angustias, depresiones, ansiedad, o incluso problemas más complejos.
Aprende a usar la energía con el curso de reiki
El reiki es una terapia japonesa en el que el practicante impone las manos para emitir la energía con fines curativos. Cada sesión puede ser diferente. Continúa leyendo si quieres saber cómo hacer reiki, y curarte a ti y a los demás.
Cómo hacer reiki y aprender a usar nuestra energía
Puedes practicar contigo mismo o con otra persona. El paciente estará acostado, preferiblemente en una camilla de masaje; puede quedar vestido pero descalzo.
- Para comenzar, el lugar deberá ser tranquilo. Pon música suave y esencias. Vacía tu mente y pon tu atención en la punta de los dedos medios de las manos. Relájate y respira pausadamente. Eso es meditar: A través de la meditación es como puedes comenzar a percibir la energía de tu propio cuerpo y, en consecuencia, del de los demás.
- Relaja tu mente y respira profundamente para centrarte. Para comenzar la terapia, utiliza los símbolos del reiki: Cho Ku Ray (símbolo de poder), Sei Hei Ki, Hon Sha (símbolo mental / emocional), Ze Sho Nen (símbolo de la distancia), Tam-A-Ra Sha (factor del equilibrio) y Dai Ko Myo (símbolo maestro). Sólo los maestros de reiki certificados tienen el conocimiento para usar estos símbolos.
- Vas colocando las manos sobre los puntos energéticos del cuerpo, llamados chakras, para que la energía vital comience a fluir. Es normal que las personas se queden dormidas debido a la profunda relajación que produce el reiki, lo cual no influye en el resultado. Otras sienten cosquilleos, calor o frío en distintas partes del cuerpo según fluye la energía, ven colores, se sienten flotar, y otras no sienten absolutamente nada, cosa que tampoco influye en cómo hacer reiki.
Cómo hacer reiki: Duración y efectos del tratamiento
Se pueden hacer sesiones individuales para relajarse profundamente, o bien el tratamiento de cuatro sesiones para trabajar más a fondo y sacar al paciente de algún estado de desarmonía. Luego de finalizado el tratamiento, se pueden tomar sesiones individuales con la frecuencia que necesite el paciente.
Muchos experimentan cambios de humor o molestias como diarrea, vómito, náuseas, dolor de garganta; algo completamente normal, pues el organismo atraviesa lo que se llama una crisis de sanación, y no significa que el reiki no funcione. Una crisis de sanación es un proceso que se activa con el reiki, mediante el cual nuestro cuerpo físico libera toxinas acumuladas en los órganos, y nuestro cuerpo mental/emocional libera emociones o patrones de pensamiento nocivos.
Cada persona responde al tratamiento de manera distinta, pero por lo general, para sufrir una crisis de sanación, se debe realizar un tratamiento de varias sesiones y la persona se limpia a fondo de los bloqueos. Mientras más largo sea un tratamiento de reiki, más duraderos sus efectos: una sesión, por ejemplo, puede actuar sobre las consecuencias y resolver problemas puntuales; pero si el reiki se aplica planificadamente, se orienta hacia la causa de los males y armoniza al individuo.